Los centros educativos contarán a partir de este curso con nuevos aliados para mejorar la seguridad. Agentes de la Policía Local, la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía acudirán a los colegios de Primaria y Secundaria y a los institutos para participar en charlas, conferencias, talleres o debates con el objetivo de evitar actitudes violentas y conflictos en la comunidad educativa. El acoso escolar o bullying, la xenofobia y el racismo, la violencia sobre la mujer, el consumo de drogas o la seguridad vial serán algunos temas sobre los que se reflexionará en las aulas, explicó ayer el subdelegado del Gobierno, Jesús María Ruiz.
La medida se incluye en el Plan Director de Mejora de la Convivencia, aprobado por el Gobierno central la pasada primavera y que ya que se ha aplicado como experiencia piloto en Zaragoza y Gijón (Asturias). El subdelegado explicó que el programa, que tendrá una vigencia de dos años, será “totalmente flexible” y podrán sumarse todos los centros que lo soliciten, independientemente de su titularidad, ya sean públicos o privados-concertados. El objetivo -aclaró Ruiz- es que los actos que se organicen “sean a la medida de cada centro y de cada clase”. La Junta Local de Seguridad se reunió ayer de manera extraordinaria para abordar el proyecto, cuya principal novedad es que, por primera vez, llevará a las aulas a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para prevenir actitudes como la violencia entre escolares.
Hasta ahora, todos los programas desarrollados en los centros educativos para combatir el bullying partían de la Junta de Andalucía y se ceñían, exclusivamente, al profesorado, los alumnos y las asociaciones de madres y padres. Este curso, sin embargo, la Subdelegación ya ha nombrado a interlocutores del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil para “fortalecer la cooperación con las autoridades educativas”. El representante del Gobierno central en Córdoba explicó que los centros tendrán hasta el día 20 para adherirse a la iniciativa y, a partir de ese momento, los agentes iniciarán una ronda de entrevistas para detallar qué recursos necesita cada colegio. En esta labor también participarán los alumnos, que podrán explicar a través de cuestionarios cuáles son sus inquietudes en cuestiones de seguridad.
La alcaldesa, Rosa Aguilar, mostró el “compromiso pleno” del Ayuntamiento para erradicar la violencia en las aulas, y advirtió que aplicará una “tolerancia cero”. La regidora insistió en que se trata de un plan “educativo”, que profundizará en la “coordinación” entre las fuerzas de seguridad y las administraciones. El absentismo, la violencia de género y la normalización de la convivencia serán algunas de las materias que centrarán los talleres, enumeró Aguilar. La delegada de Educación, María Dolores Alonso, destacó que “en la prevención está el éxito” y subrayó que el programa no tiene un carácter correctivo, sino “plenamente formativo y educativo”. Alonso aclaró que los talleres no se incluirán en la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía.
Noticia publicada en ‘El Día de Córdoba’, 6-09-07 – ÁNGEL ROBLES
